masculinidad sin violencia de género

«Por primera vez el hombre pone en cuestión su identidad y sabe que la violencia contra las mujeres no debe ser posible», diceErick Pescador Albiach Sociólogo y sexólogo
Erick Pescador Albiach (Madrid, 1971) se presenta en su currículum como especialista en género, masculinidades y prevención de violencia. Es sociólogo y sexólogo. Ayer estuvo en Cáceres para impartir en la Casa de la Mujer un taller titulado: 'La importancia del desarrollo de las asociaciones de hombres por la igualdad: Nuevas formas de masculinidades'. La actividad ha estado organizada por el Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX).
-¿Qué nuevas formas de masculinidades existen?
-Son las otras formas identitarias de ser hombres que no tengan que ver con la estructura tradicional, que es de violencia y de relaciones en desigualdad. Los hombres son, la mayoría de las veces, la causa y el origen de los problemas de violencia, de agresiones y de discriminación. Hay que inventar otras formas de ser hombre.
-¿Y qué papel juegan las asociaciones de hombres por la igualdad en este proceso?
-En estos grupos se habla de cómo somos y de cómo podemos ser y qué parámetros de comportamientos podemos cambiar para que haya relaciones de paz y menos relaciones de violencia. En España hay, al menos, 36 asociaciones de este tipo.
-¿Qué ocurre con las nuevas generaciones?
-Desde mi perspectiva, puedo asegurar que estamos en un proceso de pequeña vuelta atrás. Ante la dificultad de encontrar un nuevo modelo de ser hombre vivible, que no sea violento, los adolescentes vuelven al modelo tradicional. Lo primero que hay que hacer en este proceso de cambio es trabajar a nivel educativo, en la escuela, en la posibilidad de construir formas de hombres que tengan habilidades múltiples. Las niñas juegan con muñecas y balones, pero los niños no han aprendido todavía a jugar con muñecas.
-Haga un retrato del hombre actual.
-No sé si hay algún parámetro que pueda describir a un hombre, tal cual. Pero sé que, por primera vez, el hombre está poniendo en cuestión su identidad. Por primera vez, es un hombre que piensa que la violencia no es un mecanismo de acción. Y esto se ha conseguido con las leyes nuevas de igualdad, con la mirada diferente de los medios de comunicación hacia esta realidad... Está claro que las relaciones no eran justas. El hombre de hoy sabe que la violencia contra las mujeres no debe ser posible, pero le falta construir el otro lado: la paz, el buen trato. Le falta también trabajar sobre su propia identidad.
Políticas de igualdad
-¿Cómo sería el hombre ideal, ese del que habla en sus talleres?
-No existe un modelo de hombre ideal. El error de los modelos es cambiarlos por otros modelos. Sería el hombre que no incluyera la violencia en su quehacer diario. La violencia no es solo dar una bofetada. La violencia de género es la agresión, es el poder sobre la otra persona, la dominación, la no consideración del otro. Y esa violencia se produce todos los días por la mayor parte de los hombres. Lo más importante es que la sociedad cambie la idea que tiene de violencia.
-¿Las políticas de igualdad han sido efectivas?
-Hay que tener un punto de justicia. Llevamos 15 años con políticas reales de intervención sobre igualdad y son 4.000 años de patriarcado. Ha habido avances importantes durante estos últimos años, pero todavía queda mucho por hacer. El cambio hacia la igualdad es posible, siempre y cuando los hombres participemos en la construcción de esa igualdad.

entrevista realizada por maría josé torrejón en revista virtual hoy.es